La presencia de la pandemia del COVID-19, la modificación en las cadenas de suministro y la escasez de materiales han sido factores que alteraron la industria automotriz, y con ello todos los mercados vinculados, como es el arrendamiento de unidades.
Los cambios se manifestaron en diversas vías, como atender a nuevos sectores que no eran mercados tradicionales, reaccionar a las demandas inmediatas de los clientes lo que motiva colocar lo disponible en portafolio, en detrimento de la elección de modelos, así como la incorporación de otras categorías.
Otro cambio que se identifica es la flexibilidad que ha exigido el mercado, en donde los plazos específicos se han tenido que transformar por periodos acorde a cada uno de los clientes y en función de sus proyectos.
En la perspectiva de Luis Nava, los montos de inversión también se han desplazado hacia la gama alta y eso es un cambio que se han manifestado, además de la incursión de sectores a este mercado, que fueron los que motivaron crecimientos de operaciones en 2020, como el farmacéutico, alimentos y, evidentemente, comercio electrónico (e-commerce).
Arrendamiento
El atender mercados fuera del target, aunado a una colocación más expedita y flexible de los contratos han sido fundamentales para que en lo que va del año GSA Leasing mantenga un crecimiento de 27-30% respecto al último trimestre del 2020, que fue el de mayor avance para la empresa.
No obstante, hacia delante y derivado de la incertidumbre que existe en cuanto a la disponibilidad de las piezas, es que Luis Nava no puede pronosticar el comportamiento del mercado hacia 2022.
Nava destacó las ventajas del esquema de arrendamiento puro, entre los que se encuentra, además de la deducibilidad, los montos de inversión que rondan en el 8% del valor de la unidad, mientras que en el crédito tradicional puede oscilar entre 15 y 30 por ciento.
Los usuarios recurren a la red para buscar datos que los ayuden a conocer más sobre determinados productos financieros.
Antes de contratar cualquier servicio o producto financiero, una de las recomendaciones que siempre brindan los expertos es buscar información para conocer a fondo el producto en cuestión. Gracias a que hay un mayor acceso a Internet, esta investigación se da a través de buscadores online que facilitan la obtención de datos relacionados al sector financiero.
Cómo sacar un préstamo, pagar deudas, tarjetas de crédito y qué banco es mejor, son algunos de los conceptos que más buscan los mexicanos en Google para conocer sobre la contratación de servicios financieros, así como conceptos de finanzas personales de los cuales tienen dudas.
Crédito
Un un ejercicio realizado en la herramienta interactiva de búsqueda Google Trends, arrojó que diferentes conceptos y términos han tenido un crecimiento importante durante los últimos 12 meses, algunos en particular tuvieron un aumento en el último trimestre.
Juan Carlos Gómez, director de industria para comercio minorista y finanzas en Google México explicó que debido al confinamiento derivado de la pandemia de Covid-19, la contingencia modificó tanto los hábitos como la forma en cómo los mexicanos consumen información sobre servicios financieros.
Ahora, los mexicanos recurren cada vez más a la tecnología para investigar sobre productos principalmente porque les permite ahorrar tiempo, es más fácil, a la par que la cantidad enorme de información que encuentran; lo que los beneficia para una mejor toma de decisiones.
“Acudimos en mayor proporción a los medios digitales para entender qué vamos a adquirir, qué nos funciona en vez de acudir con un amigo o familiar, o adquirir directamente a la institución financiera. El usuario tiene en su pantalla la posibilidad de entender, conocer, comparar y decidir, cada vez más sobre sus finanzas personales”, agregó.
El experto digital enfatizó que antes la información sobre un servicio financiero se daba solamente a través de recomendaciones de amigos o conocidos; lo cual ha cambiado con el avance de Internet en donde ahora no sólo se obtienen datos, también se comparten experiencias con otros usuarios.
¿Qué es lo más buscado?
De acuerdo con información compartida por Google México, el concepto “Crédito” ha sido uno de los más buscados en todo el año, siendo febrero y junio los meses con un mayor pico de búsquedas hechas por los usuarios.
Asociado a este término, se suma el de “Cómo sacar un crédito” que también ha sido de interés de los mexicanos. Según la herramienta digital, los repuntes en este tipo de consultas se dieron en diciembre del 2020 y marzo de este año con 100% de las búsquedas. Apenas en julio, el tema de cómo sacar un crédito volvió a crecer en el buscador alcanzando 84% del interés de las consultas.
Respecto a tarjetas de crédito, también es una de las principales búsquedas de los internautas. Si bien este concepto tiene altas y bajas considerables, en los últimos 12 meses, es una constante de búsqueda por parte de los usuarios al situarse entre el 50 y 75% de sus consultas. El pico más alto de cuando los mexicanos fue en agosto de este año con un 100% de interés.
En cambio, sobre pagar una deuda, en el último año es un tema que también tiene la atención de los usuarios, ya que en distintos meses tiene 100% de búsqueda registrada como son diciembre del año pasado, y febrero y julio de este año.
Deudas
Uno más es el de formas de ahorrar, en donde se observa que los mexicanos buscan diferentes alternativas para apartar una parte de sus ingresos y mejorar este hábito. De acuerdo con Google Trends, aunque es una consulta que hacen a lo largo del año, en enero y febrero de este año alcanzó su pico máximo de 100%, principalmente por tratarse de propósitos de año nuevo.
Marcos Aramburu, gerente de marketing de investigación para Google en Hispanoamérica explicó que el repunte en alguno de los términos se debe incluso algunos meses clave en donde los usuarios tienen más necesidades de solicitar un producto financiero como puede ser pedir un crédito en la época de vacaciones.
“El tipo de búsqueda que vemos es muy relevante para los usuarios, les dan información para comparar servicios. Son términos que ayudan a entender más como el consumidor toma una decisión teniendo más información, la cual consulta en internet”, apuntó.
Mejores decisiones para su bolsillo
A decir de los expertos, que los mexicanos busquen este tipo de datos en internet refleja que están interesados en conocer más sobre productos financieros, además de que beneficia a su educación financiera y una mejor toma de decisiones que al final, impactan en su bolsillo.
La pandemia por SARS-CoV-2 desafortunadamente desencadenó una doble crisis: sanitaria y económica. De acuerdo con el Inegi, tan solo al inicio de la pandemia cerca de 12 millones de mexicanos perdieron su empleo -formal o informal- y con ello su seguridad en muchos sentidos.
Inflación vs. inflación médica: dos caras de la misma moneda
La inflación se refiere al aumento sostenido y generalizado en los precios de los productos básicos (como verduras, tortilla, gasolina) y servicios (luz, transporte, gas), el cual es generado principalmente por una disparidad entre la demandada y la disponibilidad de estos.
El Banco de México estima que la inflación cerrará el año en un nivel cercano al 6%, sin embargo, ese no es el único aumento de precios que deberemos enfrentar, pues también existe otro tipo de inflación:
la inflación médica, misma que se refiere al aumento sostenido y generalizado de los costos que implica la atención médica, y la cual incluye estudios de laboratorio, imagenología, pruebas,
tratamientos, hospitalizaciones, uso de quirófanos, material quirúrgico, así como los honorarios del personal de salud.
¿Por qué aumenta el costo de la atención médica?
Diversos factores generan ese constante incremento; por un lado, los propios avances científicos, farmacológicos y tecnológicos que se tienen en el campo; por otra parte, como indica el profesor Paul
Campbell de la Escuela de Salud Pública de Harvard, están los impulsores del costo, variables directamente proporcionales al aumento de la inflación médica que incluyen las tendencias
demográficas y epidemiológicas actuales (aumento de esperanza de vida y transición de pirámide poblacional); la creciente importancia de la tecnología durante el diagnóstico y tratamiento de las
enfermedades; la consulta excesiva de médicos especialistas; la introducción de nuevos medicamentos biológicos de costo muy elevado; las amenazas de mala praxis; y el alto costo administrativo de hospitales y aseguradoras.
¿Cómo afecta esto a nuestros bolsillos?
Uno de los sectores más afectados por la inflación médica es el de la medicina privada, en específico, los seguros de gastos médicos mayores. De acuerdo con Rubén Illescas, director general del Grupo
Interesse Agente de Seguros, Fianzas y Fondos de Inversión, se estima que al final de este año la inflación médica del país será del 16%, lo cual se reflejará en el aumento en el costo de las pólizas de
seguro de gastos médicos mayores.
Recordemos que la AMIS (Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros) define el seguro de gastos médicos mayores como un contrato que brinda seguridad financiera y cubre los gastos de
atención médica de imprevistos como un accidente o enfermedad. Funciona cubriendo los gastos de hospitalización, atención médica, intervenciones quirúrgicas, medicamentos, análisis clínicos y algunos
otros servicios profesionales. Algunos de ellos dependen de la compañía aseguradora y el plan que elijas.
“Desafortunadamente todas esas inversiones en tecnología, tratamiento, medicamentos y atención especializada tienen un costo que debe ser cubierto y generalmente se transfiere de manera indirecta a las personas que no tienen seguro o a las aseguradoras a través del mecanismo de la inflación médica. Estamos hablando de una inflación cuatro veces mayor a la inflación general del país, lo que resulta una locura. Y si hacemos la proyección de un incremento anual de entre 12 y 16%, en 5 o 6 años resultará inviable contratar una póliza de seguro de gastos mayores”, comentó Rubén Illescas en el marco de la charla “
Retos y medidas frente a la inflación médica
Como indicó Santiago Fernández, vicepresidente ejecutivo de autos, daños y salud de Axa, durante el mismo evento, la industria de las aseguradoras privadas está frente a un enorme reto: brindar beneficios a los asegurados sin que el precio de su póliza se vuelva exorbitante.
“El verdadero objetivo no es recortar beneficios para disminuir precios, sino buscar alternativas y productos que favorezcan la salud de los pacientes para que eso se vuelva el eje central de todo.
Primero la salud y evitar las consecuencias. La creciente inflación médica es un problema nacional en el que diversos sectores deben discutir y proponer soluciones innovadoras, no obstante, de
manera individual aún tenemos la herramienta más importante en nuestro poder: el cuidado de nuestra propia salud y la prevención de enfermedades”, aseveró.
Si bien se trata de una estrategia personal que requiere bastante disciplina, lo cierto es que sigue
siendo la manera más efectiva y económica de mantenernos saludables en medio de una crisis como la que actualmente vivimos y las que estén por venir.